A partir de 2008 esta Biblioteca ha presentado facsímiles de novelas cortas para ilustrar la relación entre el género y sus variados soportes: libros, anuarios, revistas y diarios de extensas páginas. En sus apretadas columnas se leían, con tipografía diminuta, “novelitas” publicadas en una o varias entregas o en folletines coleccionables. Si los autores estuvieron conscientes de las virtudes y maleficios de dicha periodicidad —además de las expectativas del público y de los editores—, los lectores actuales contamos con este caleidoscopio para multiplicar el placer de las historias y el conocimiento de su transcurrir editorial.